Bueno, hoy os
llevo una nueva reseña, en este caso de un libro de la
biblioteca (que debí devolver hace unos días ;P). No sé cómo lo
hago, pero los libros de Nicholas Sparks no son
nunca míos, sino cogidos de la biblioteca U.U Prometo que algún día me
haré con una de esas macro ediciones que tienen portadas preciosas y van en una
cajita toda mona.
Tengo un buen sabor de boca de este libro (lo
terminé antes de ayer por la noche), pero tras levantarme por mañana he vi que,
aunque me ha gustado mucho, no supera a Un paseo para recordar ni El cuaderno de Noah (es muy difícil, lo sé). Así que os lo recomiendo pero no os esperéis
una historia TAN TAN, sino que es una más “normal” (podríamos decir que más
plausible, la verdad). El problema es mío, que quiero a un Landon o un
Noah (*w*)
Sinopsis
Jeremy Mash es un periodista
especializado en desenmascarar fraudes con apariencia de hechos sobrenaturales.
Allí donde parece darse un caso extraño que escapa a toda explicación lógica,
él se empeña en demostrar que para encontrarla solo hace falta investigar el
caso a fondo y seguir en todo momento los dictámenes de la razón. Hasta ahora
nunca se ha equivocado, y con esa determinación viaja a Boone Creek, una
pequeña localidad de Carolina del Norte, en busca de la causa real que se
esconde detrás de unas apariciones fantasmagóricas en el cementerio del pueblo.
La leyenda local habla de una maldición
y de almas que vagan con sed de venganza, pero ¿Cuánto de verdad y cuánto de
fábula hay en esa leyenda, como en todas las demás?
Sin embargo, Jeremy ha de enfrentarse a
algo verdaderamente inesperado, para lo que esta vez su razón no tiene
respuesta: el encuentro con Lexie Darnell, la nieta de la vidente del pueble. Y
es que Jeremy podía prever que Lexie lo ayudaría con sus pesquisas gracias a su trabajo como bibliotecaria, pero
no que él se acabaría enamorando perdidamente de ella.
El dilema no tardará en surgir: si la
joven pareja quiere empezar a construir un futuro en común, Jeremy deberá
arriesgarse a otorgar un voto de confianza a la fe ciega, en la que nunca había
creído.
Opinión personal (sin spoilers)
Este libro, como
veis, trata sobre la relación que se desarrolla y crece entre Jeremy y Lexie. Él es un periodista que
escribe sobre temas científicos, desenmascarando muchas veces engaños y
patrañas varias. Y Lexie es una chica de pueblo, bibliotecaria (y
por lo tanto culta), y que no tiene un pelo en la lengua.
La historia me ha
gustado, es sencilla y bastante realista, principalmente por los personajes y
el entorno, ya que podríamos encontrar este tipo de personas en cualquier
lugar. Lo único que es menos creíble, es el tiempo en el que pasa todo.
Realmente creo en los flechazos y en enamorarse de alguien con solo verle,
oírle y pasar un rato con esa persona, peeeeero creo que en este caso podría
haber dicho que pasaban juntos un par de semanas que la historia no habría
perdido nada.
Ese es el único
“punto negativo” en sí, ya que la narración y la forma como Sparks nos conduce
por la historia es perfecta. Puede que al principio fuera algo más lento pero a
medida que se avanza, te vas enganchando más y pasas páginas sin parar.
[También tenemos que tener en cuenta que empecé el libro cuando estaba de
vacaciones con mis amigos, así que podía leer tres páginas seguidas o podían
pasar un par de días y ni lo abría. Por lo tanto, mi visión de las primeras 60
páginas no son lo más perfecto en opiniones objetivas].
En mi caso, llevo
siempre muchas expectativas a la hora de coger un libro de este autor,
esperándome la historia más preciosa del mundo, y en este caso encontré una
historia muy bonita pero no la que más. Eso no lo hace peor, solo es un
comentario para que veáis que es mejor rebajar un poquitín expectativas, que no
siempre se puede ser LO MÁS DE LO MÁS.
Pasando a los
personajes, nos encontramos con dos grupos: los urbanitas (Jeremy,
Alvin y
Nate)
y los pueblerinos (Lexie, Doris, Rodney, Rachel y el alcalde).
En primer lugar, Nate
me parece el típico agente estresado y estresante que se obsesiona con el
subir-subir-y-subir. Me cayó bien, aunque en algún momento me estresaba un poco
incluso a mí XD No aparece mucho, pero sí hace sus apariciones necesarias y nos
cuenta lo suficiente como para entender bien el entorno de Jeremy.
El segundo de los
urbanitas es Alvin,
que se pasa también por el precioso pueblo de Boone Creek con sus pintas tan
“originales” de cámara. Me dio mucha sensación de libertad, es decir, que me
pareció un tipo que hace lo que quiere cuando quiere sin importarle lo que los
demás puedan opinar de él. Como con Nate, no lo conocemos profundamente, pero sí
se cuentan los detalles suficientes como para que esté todo atado y entendible.
Y Jeremy, ah Jeremy!,
me encantó!! Tiene su punto de pragmático (a veces un poco demasiado), pero
tiene muy claro lo que siente y va a por todas. Nos regala un par de momentos
de esos que todas soñamos. Y son esos momentos los que me empujaban a seguir y
seguir para ver cómo iba a terminar todo. Se le describe como guapo, así que en
mi imaginación es un hombre alto, de amplios hombros y un poco fibrado (no
musculado, fibrado), y como alguien listo y aplicado. Es casi el hombre
perfecto (el casi es para no crear expectativas, que luego el modelo de
perfección cambia según cada persona).
Los de Boone
Creek son más pausados, y tienen sus matices y puntos de estereotipo. Por
ejemplo, Rachel
es la camarera guapa (pero no mucho mucho) que siempre trata con apelativos
cariñosos a todo el mundo. Me cayó bien, así simpatiquilla la chica y me gusta
cómo termina :)
El alcalde es todo un personaje, con su cháchara va haciendo
que los demás hagan lo que quiere, y que encima crean que es idea suya. Es
medio hiperactivo y daltónico, pero al final ves que tiene buen corazón de
alcalde. Se ve bastante divertido y da humor a la trama, y en algunos momentos
puede parecer tan poco serio que crees que no vale ni para recoger hojas.
Rodney es el ayudante del sheriff, y el tipo de policía
que dedica más tiempo al cuerpo que a la mente, a no ser que sea pensar en Lexie,
la mujer de sus sueños que “protege” ante cualquiera. No es que me haya caído
mal mal, pero es de esos personajes que piensas “pobrecillo, es que no pinta
nada aquí! Búscate a otra a la que acosar”. Finalmente termina bien, pero ese
pensamiento no me desapareció.
La señora Doris,
la mona abuelita de Lexie, es uno de esos personajes que le caen
bien a todo el mundo. Es la compañera de batallas y la jefa, la que echa una
mano cuando realmente es necesaria. A mí me cayó bien todo el rato, aunque hubo
un momento que creía que podía pasarse al bando malo por un par de minutos. Es
viejecita y adorable, pero no de silla de ruedas, sino de las movidas que van
por ahí como si no recordaran haber tenido un infarto.
Y Lexie…
es Lexie.
Su pasado es boniquillo, y aunque se hace la difícil para no sufrir más en el
amor, sabes que acabará cayendo ante el encanto de Jeremy.
Es el personaje que tiene más pasado después de Jeremy
(o al menos el de él es más intenso en mi opinión), y tampoco se
queda atrás en carácter. Es una chica lista y fuerte que en ningún momento cae
en desgracia por un hombre (bueno, una vez pero era una joven inocente). Por eso
mismo me gustó tanto el personaje, porque aunque podría acabar como la típica
llorona que no superaría nada sola, acaba serena y cuerda.
En resumen, Fantasmas del pasado, es un libro bonito para leer un fin de semana
plácido, que contiene una historia de amor bonita y sencilla, con sus subidas y
bajadas. Así pues, unos personajes realistas que viven su historia de amor a su
manera y manteniendo sus caracteres.
Aunque no sea la historia más
espectacular de Sparks, es una bonita historia que agradará a los seguidores y
seguidoras del autor.
4/5 [8] |
¿Os llama?¿Lo habíes leído?¿Os gusta
Nicholas Sparks?
Espero
vuestros comentarios! ^^
Besitos<3